Le pedí a Dios, que me ayudará a darle importancia a mi voz, le dije que lo que yo tenía que decir si era importante, valioso y podía ayudar a muchas personas. Siempre lo supe, dentro de mi corazón. Y me lo dio, con una comunidad que nunca me imagine tener, tengo nuevas amigas, tengo un círculo nuevo y seguro que me escuchan y valor lo que digo.
Gracias, Señor, siempre escuchas mis plegarias.

No hay comentarios:
Publicar un comentario